El peso volumétrico es un sistema métrico orientado a calcular el coste de un envío en base al volumen/dimensiones del bulto.
Este sistema normaliza el coste de los envíos en los que el tamaño del paquete es proporcionalmente superior al peso real, es decir, se refiere al espacio que la mercancía ocupa en un vehículo de reparto.
Cada empresa de transportes calcula el peso volumétrico de una manera distinta para determinar sus tarifas, sobre todo en los servicios aéreos. Siempre se debe tener en cuenta el valor más alto entre el peso real y el peso volumétrico.
A continuación, te explicamos cómo calcularlo:
Se calcula multiplicando el largo, ancho y alto del paquete por su cubicaje. Debes utilizar la fórmula: (Largo x Ancho x Alto)/N*
*El valor de "N" variará en función de cada empresa de transporte.
Ejemplo: Paquete de 120 cm x 40 cm x 10 cm, su volumen sería de 0,05 m3.
Al contratar con Packlink no tendrás que calcular el peso volumétrico. Nuestro sistema realizará la conversión según el peso/medidas que facilites y el transportista que selecciones.
Básicamente, el resumen de todo esto es que aunque 1 Kg de hierro pesa lo mismo que 1 Kg de paja, el volumen del paquete es totalmente distinto según su ocupación en el camión del transportista. Bajo este principio es que se factura el servicio.
Imagina que vas a enviar un libro a Reino Unido, el cual mide 23 cm x 15 cm x 2 cm y pesa 200 gramos, pero en el momento de empaquetarlo decides meterlo en una caja mucho más grande, como la de un monitor de 40 pulgadas en lugar de una acorde a su tamaño. El peso del paquete seguramente no llegará a 1 Kilo, pero ocupará mucho más espacio de lo esperado y esto se tendrá en cuenta para la organización, traslado y facturación de la mercancía.